Otra usurpación por parte de la Comunidad Indígena del PUEBLO DE TOLOMBON.

Lamentablemente en la localidad de Gonzalo, Dpto. de Trancas, Tucumán, los vecinos viven en una situación constante de inseguridad que no deja gozar de la tranquilidad y belleza propia del lugar. Es que no es ninguna novedad allí que miembros de una supuesta comunidad indígena de tolombón, inventada desde hace unos años en la zona, cometa toda clase de hechos ilícitos en contra de los propietarios de los inmuebles en ese lugar. Un hecho nuevo de inseguridad ocurrió el pasado 22/09/2.016, cuando un grupo de personas, entre ellas Santos Ríos, José Ríos, Genaro Morales, Américo Velardez, Juan Cruz, Carlos Villagra, Maria Cleofe Valderrama, entre otros, irrumpieron en forma violenta en la propiedad de Carlos Guerineau, rompiendo posted, cortando alambrados y tirando abajo árboles centenarios. La indignación por este nuevo hecho de inseguridad dio curso a la denuncia respectiva ante los tribunales penales de esta provincia, que ya está siendo investigada para determinar los autores del delito y su responsabilidad en el mismo, para su posterior detención. Esta causa se suma a otras tantas causas por usurpaciones y otros delitos cometidos por estos falsos indígenas, que usan la comunidad aborigen de tolombon como escudo para tapar todos los hechos ilícitos que cometen a diario. Recordemos que otra causa caratulada “MORALES, RUFINO y JORGE GONZALEZ S/ USURPACIÓN DE PROPIEDAD” Expte.: 38224/12, fue elevada ya a juicio oral en el Juzgado Correccional de la II Nominación a fin de juzgar a los delincuentes que se apropiaron en la localidad de Gonzalo de la propiedad de una campesina, la Sra. Isolina Díaz, quien se dedica al pastoreo de cabras y a realizar los mejores quesos que existen en la zona. Cabe agregar que todos estos delitos cometidos por miembros de la inventada comunidad indígena del pueblo de tolombón, no existirían si no fueran incentivados por asociaciones de abogados de derechos humanos como ANDHES y FOGON ANDINO que, con el afán de generarse trabajo profesional a raíz de estos delitos, facturan del INAI (Instituto Nacional de Asuntos Indígenas) suculentos honorarios, sin impórtales en lo más mínimo la seguridad de la población en la localidad de Gonzalo, en una muestra total de irresponsabilidad y de falta de ética.